COMPROMETIDAS / EL PEQUEÑO COMERCIO QUE DA LA TALLA
COMPROMETIDAS / EL PEQUEÑO COMERCIO QUE DA LA TALLA
COMPROMETIDAS / EL PEQUEÑO COMERCIO QUE DA LA TALLA
COMPROMETIDAS / EL PEQUEÑO COMERCIO QUE DA LA TALLA
COMPROMETIDAS / EL PEQUEÑO COMERCIO QUE DA LA TALLA

Hoy en la sección «comprometidas» rendimos homenaje a las  pequeñas empresas. Esas que, a pesar de las dificultades generadas como consecuencia de la pandemia de la COVID-19, están saliendo adelante con grandes esfuerzos pero también con grandes dosis de solidaridad. Ponemos el foco en la escuela de patronaje y alta costura Tissoraubicada en el distrito Poblados Marítimos de la ciudad de València. Este pequeño gran comercio ha reorientado su actividad comercial hacia la venta de material técnico para el desarrollo de equipos de protección individual (EPI). La nueva línea ha permitido al comercio valenciano mantener su nivel de ingresos y poder cubrir los gastos de aquellas líneas comerciales más afectadas por la pandemia.

La escuela de patronaje y alta costura Tissora mantiene sus ingresos con la venta de EPI.

El comercio minorista representa el 13,8% del tejido empresarial de la Comunitat Valenciana, según el Informe Anual de la Distribución Comercial (2019). Las ventas han mantenido la tendencia decreciente de los últimos meses según la Radiografía del comercio valenciano de septiembre de 2020 de la Cámara de Comercio de la Comunidad Valenciana, siendo el comercio minorista uno de los más afectados. Únicamente el grupo de equipamiento del hogar y otros productos, entre los que destacan los tecnológicos, han logrado superar los índices de ventas del verano anterior, indica el informe.

En este contexto de crisis como consecuencia de la Covid-19, la supervivencia es el día a día de muchos comercios minoristas. Sin embargo, hay empresas que han encontrado un resquicio para la innovación necesaria que les permita salir a flote aprovechando las oportunidades de negocio que emergen de esta situación. Así es la gran revolución del pequeño comercio.

La supervivencia es el día a día de muchos comercios minoristas

Es el caso de Tissora, una empresa formada en la actualidad por un equipo de diez personas liderado por Eva García, fundadora y directora de la Escuela y Pablo Barbero, cofundador y director económico. «A pesar de haber tenido a toda la plantilla en ERTE hasta junio de 2020, la escuela no ha tenido que lamentar grandes pérdidas económicas ni de personal«, asegura Barbero.
La reconversión económica de Tissora se fraguó durante los primeros meses del confinamiento, cuando una alumna decidió donar una bobina de más de 1.300 metros de tejido apto para el desarrollo de EPI. Más de trescientas alumnas se pusieron manos a la obra y decidieron confeccionar equipos de cuatro piezas para el Hospital de Nules y el Universitario de la Plana. Correos y la ONGD Bomberos por el mundo se encargaron de hacer el reparto. Además, durante este mismo periodo de manera altruista también elaboraron patrones y video tutoriales como el que se puede apreciar en el vídeo para elaborar mascarillas.

La escuela de patronaje y costura Tissora mantiene sus ingresos con la venta de EPI

Tras esta experiencia solidaria, decidieron focalizar parte de su trabajo en la venta de materiales especializados para la confección de mascarillas: algodones hidrófugos, microfibras, material homologado para mascarillas UNE 0065:2020, telas estampadas, gomas y alambres. La disminución de ingresos como consecuencia de la menor afluencia de alumnas se vio compensada con el aumento de ingresos de las ventas de esta nueva línea de negocio. “Cuando abrimos en mayo sin saber lo que iba a pasar nos encontramos con colas y colas de gente que venían a adquirir nuestros productos. Hemos duplicado las ventas en la tienda”, asegura Pablo Barbero.

Pablo Barbero, director económico, declara que se han especializado en la venta de material técnico para la confección de mascarillas

La escuela que cuenta actualmente con más de 250 alumnos matriculados, mantiene sus clases presenciales con seis personas por curso, cifras muy similares a las que tenían antes de la pandemia. Ahora afrontan el futuro con moderado entusiasmo. “El futuro es incierto. Ahora mismo no sabemos si mañana tendremos o no toque de queda. Aún así, tratamos de estar preparados. Estamos trabajando en una nueva línea de comercio electrónico y planificando un posible escenario de teletrabajo” apunta el cofundador de Tissora.